El queso de bola, un manjar de la cocina yucateca

Toda persona que haya visitado y conocido el hermoso estado de Yucatán, sabe de primera mano que el queso de bola es uno de los ingredientes típicos de la gastronomía yucateca, es por eso que cuando visites el estado no puedes dejar de probar por lo menos algún platillo con este ingrediente. 

Dentro de la cultura alimentaria de Yucatán, en el sureste mexicano, el queso de bola forma parte importante de su gastronomía cotidiana, platillos como el queso relleno, marquesitas, pasteles, pays, chiles rellenos y hasta helados de queso de bola, avalan este rico ingrediente.

El queso de bola ha crecido tanto dentro del territorio que se convirtió en uno de los principales estandartes de la cocina yucateca. A pesar de que su origen no es mexicano, es un clásico de la península. 

Hay teorías de que el queso de bola o queso Edam llegó a Yucatán en la época del Porfiriato, gracias a unos barcos holandeses que buscaban el aclamado “oro verde”, que en realidad era el henequén producido en Yucatán. Sin embargo, el origen del queso de bola sigue siendo un misterio, hay otros diversos testimonios, que cuentan dice que estos fueron traídos a territorios mexicanos a través de barcos holandeses que naufragaron en la zona. 

En sus inicios, se comercializaba en el puerto de Chetumal, por lo que diversas personas lo apodaban con ese término. 

Se cuenta que en una noche donde había tormentas fuertes y con el peligro de hundirse, las personas que venían en las embarcaciones naufragaron en las costas de la península, en el puerto de Chetumal, Quintana Roo, este barco contenía entre todos sus cargamentos el delicioso queso Edam o ‘Queso de bola’, entre otros productos lácteos finos, como mantequilla en lata.  

Esto dio como resultado que el queso Edam, o de bola se empezará a propagar en todo el estado Yucatán de manera clandestina, ya que era tanta la necesidad comercial de mover el producto que llevó a todo esto. 

Otras de las teorías es que el queso pudo llegar gracias a la gente de clase alta que regresaba de sus viajes por toda Europa, ellos mismos traían el queso de bola ya qué su sabor era único, entonces lo promocionaban con gran euforia y emoción a Yucatán. 

Habrá muchas teorías sobre el origen de este delicioso producto, pero algo de lo qué estamos seguros es que el queso de bola es uno de los productos que todos los yucatecos han adoptado de manera perfecta.

Hoy en día la gastronomía yucateca en algunos de sus platillos tiene al queso de bola como ingrediente principal, alrededor de la ciudad podrás encontrar lugares en donde se preparan las deliciosas marquesitas, antojito que inventó Don Polo, un vendedor de helados que, en la necesidad y temporada baja, le dio una forma nueva de ver las barquillas y que hasta el día de hoy ha resultado en ser un exitoso producto que puedes encontrar en muchas esquinas o parques de Yucatán. 

Se dice que entre los años 1950 y 1980, el queso de Bola era casi un regalo esencial que todo turista mexicano quería comprar para llevárselo a sus casas, gracias al crecimiento de este producto, hoy en día lo podemos encontrar con facilidad en tiendas o mercados de la ciudad, al igual que en todo el país. 

La marca de Queso de Bola más famosa y la cual podrás encontrar más fácilmente en la península, es el del gallo azul, esta marca holandesa ha ganado gran parte del mercado y no es de a gratis, su delicioso sabor y la calidad del queso le han hecho obtener la preferencia de todos los yucatecos.