Kulubá, una ciudad maya escondida en Yucatán

Son pocas las personas que saben sobre la existencia de una zona arqueológica en Tizimín, Yucatán; se trata de Kulubá, una ciudad maya que se encuentra actualmente en restauración.  

 Un lugar lleno de historia y cultura, que ha estado en restauración varias veces, incluso en la actualidad, pero esto no ha impedido que los viajeros puedan visitar esta sorprendente zona. 

Su nombre se traduce como Agua del Perro Salvaje Kulú y se piensa fue construido entre los años 300 a.C. y 1000 d.C.  

Esta ciudad está extendida a lo largo de 9 kilómetros, quedando a 37 kilómetros de Tizimín y a 212 kilómetros de Mérida, Yucatán.  

De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología de Historia, mejor conocido como el INAH, asegura que Kulubá estaba bajo las influencias de la región Puuc y Chichén Itzá.  

Hasta hoy en día, se han contabilizado 400 estructuras dentro de la zona, entre las que destacan edificios alrededor de lo que serían rejolladas para el abastecimiento de agua con las que regaban cultivos de cacao; la plaza que se encuentra al centro y que está compuesta por 12 estructuras, así como pirámides de hasta 15 metros de altura con bases de unos 32 x 20 metros. 

Kulubá, ha recibido varias restauraciones desde 1980. Varias fueron hechas por brigadas del INAH y arqueólogos reconocidos, pero poco a poco dejó de recibir dichas intervenciones por falta de presupuesto y autorizaciones necesarias para continuar.  

Actualmente se encuentra recibiendo poca atención, sin embargo, puede ser visitada por viajeros.