
La construcción del anhelado Tren Maya está desenterrando increíbles hallazgos arqueológicos en la región maya de México. Diego Prieto, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), asegura que se trata del “mayor tesoro arqueológico encontrado en las últimas décadas”.
Los trabajadores y arqueólogos han descubierto más de 1.4 millones de fragmentos de cerámica y 50,000 bienes muebles e inmuebles. Entre los tesoros desenterrados destacan el disco solar de Chichén Itzá, la escultura del dios del maíz en Palenque y la estela dual de Uxmal.

Uno de los hallazgos más impresionantes es la cabeza del dios maya del maíz, desenterrada en un pasillo de El Palacio de Palenque, Chiapas. La escultura de 45 cm tiene más de 1300 años de antigüedad y representa al joven dios con una alargada cabeza de maíz.
Para los mayas, el maíz era indispensable para la vida. Según el Popol Vuh, los dioses usaron masa de maíz para crear al hombre. Esta cabeza es la primera de estuco encontrada en Palenque y formaba parte de una ofrenda ritual colocada en un estanque.
Otra escultura sorprendente muestra a una mujer maya de la realeza sosteniendo del cabello a un cautivo. La imagen tallada en piedra tiene un faldón decorado con huesos, símbolo de poder. Fue hallada en la zona arqueológica de Ek Balam, en Yucatán.
En Quintana Roo encontraron una exquisita gargantilla maya esculpida finamente en caracola. Cuenta con la representación grabada de 4 personajes mayas. La pieza de 3000 años de antigüedad mide menos de 1 centímetro de grosor.
La arqueóloga Maricela Salazar cree que data del periodo Clásico Terminal entre los años 830 y 900 d.C. Este collar se suma a la gran cantidad de fragmentos de cerámica, vasijas, efigies y pinturas rupestres desenterrados a lo largo de la ruta del tren.
El uso de tecnologías como GPS, topografía satelital y sensores LiDAR está permitiendo a los arqueólogos detectar rápidamente ruinas ocultas en la espesa selva o bajo tierra. Gracias a esto han podido identificar zonas de protección especial por su alta concentración de tesoros arqueológicos.
Según Diego Prieto, director del INAH, lo más valioso es poder reconstruir las estructuras sociales y el pensamiento de esta fascinante civilización maya.