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La emotiva historia de superación de «El Payaso»: De casi ser sacrificado a convertirse en leyenda del hipismo
La comunidad de Culiacán y los aficionados al hipismo en México están de luto tras la inesperada muerte de «El Payaso», un caballo de carreras que dejó una marca imborrable en la pista y en el corazón de muchos. Este campeón que estuvo a punto de ser sacrificado en Estados Unidos por una enfermedad se convirtió en un referente de superación y éxito.
Un inicio difícil en Estados Unidos
«El Payaso» no siempre fue el icono que conocemos hoy en sus primeros años este imponente caballo de pelaje café y una distintiva mancha blanca en la cara fue trasladado a Estados Unidos para competir a un nivel más alto. Lamentablemente durante su estancia en el país vecino contrajo una grave enfermedad llamada Piroplasmosis Equina esta enfermedad frecuente entre caballos es altamente contagiosa y en Estados Unidos los protocolos dictan que cualquier caballo infectado debe ser sacrificado para prevenir la propagación.
El rescate y la salvación
Afortunadamente los dueños de «El Payaso» en México no se dieron por vencidos en un acto desesperado por salvarlo lograron traerlo de regreso a México, donde no era obligatorio sacrificar a un animal por padecer esta enfermedad. Este acto no solo salvó la vida de «El Payaso», sino que permitió que su carrera continuara y prosperara en su país natal.
La carrera triunfal en México
Ya en México se recuperó y comenzó a destacarse en las pistas de carreras su elegancia, velocidad y capacidad para conectar con el público lo convirtieron en una figura emblemática del hipismo mexicano. A lo largo de su carrera acumuló numerosas victorias tanto en Culiacán como en otras partes del país ganándose el cariño y la admiración de los aficionados.
El 28 de julio de 2024 participó en una de sus últimas carreras en Culiacán compitiendo junto a su hermano, «El Peligro». Aunque no logró salir victorioso en esta ocasión la carrera fue un testimonio del amor y respeto que la gente sentía por él lamentablemente menos de 24 horas después de la competencia mostró signos de nerviosismo y agitación y su salud se deterioró rápidamente a pesar de los esfuerzos por salvarlo falleció en la madrugada del 29 de julio.
La herencia de «El Payaso»
Su legado vive a través de los innumerables aficionados que inspiró y las generaciones futuras de caballos de carreras. Su vida y carrera fueron inmortalizadas en el corrido «El Corrido del Payaso», interpretado por Serapio Martínez que narra su viaje desde ser un caballo rechazado en Estados Unidos hasta convertirse en una leyenda en México.